Según un estudio realizado en 2016 sobre las caídas en una residencia de ancianos y la influencia del entorno, aproximadamente el 20% de las caídas causan lesiones graves, como fracturas o traumatismos craneales. Algunas de estas lesiones pueden incluso ser mortales.
Las caídas son una causa importante de hospitalización y empeoramiento de la calidad de vida, pero ¿cómo mitigar sus consecuencias o incluso evitarlas por completo?
Actividad física como medida preventiva
En primer lugar, la actividad física es un elemento que juega un papel fundamental en la prevención de caídas en personas mayores.
Así mismo, realizar actividad física de forma regular ayuda a fortalecer el cuerpo y a mejorar la capacidad funcional, lo que se traduce en una mayor autonomía y seguridad en las actividades diarias.
Algunos ejercicios se pueden incluso realizar en casa sin necesidad de cualquier equipamiento:
1. Ejercicios de equilibrio
Estos ejercicios ayudan a mejorar el equilibrio y la coordinación, lo que reduce el riesgo de caídas. Algunos ejemplos de ejercicios de equilibrio incluyen:
– Pies juntos: Pararse derecho con los pies juntos y los brazos a los lados. Levantar uno de los pies y mantener la posición durante 10 segundos. Repetir con el otro pie.
– Giro de la cabeza: Pararse derecha con los pies separados a la anchura de los hombros y los brazos a los lados y girar la cabeza lentamente desde un lado a otro.
– Pie en la silla: Pararse detrás de una silla estable y sostenerse con una mano. Levantar uno de los pies y mantener la posición durante 10 segundos. Repetir con el otro pie.
2. Ejercicios de fuerza
Estos ejercicios ayudan a fortalecer los músculos, especialmente en las piernas y los brazos, lo que reduce el riesgo de caídas. Algunos ejemplos de ejercicios de fuerza incluyen:
– Sentadillas: Pararse recto con los pies separados a la anchura de los hombros y los brazos a los lados. Bajar el cuerpo como si se sentara en una silla invisible, manteniendo la espalda recta. Volver a levantarse lentamente.
– Flexiones: Pararse frente a una pared y colocar las manos en la pared a la altura del pecho. Doblar los brazos y acercar el pecho a la pared, luego empujar hacia atrás para volver a la posición inicial.
– Levantamiento de pesas: Usando pesas ligeras o botellas de agua para fortalecer los brazos. Sostener las pesas con las palmas hacia arriba y levantar los brazos hacia los lados hasta que estén paralelos al suelo. Bajar lentamente los brazos.
3. Ejercicios de flexibilidad
Estos ejercicios ayudan a mejorar la flexibilidad y la movilidad, lo que reduce el riesgo de caídas. Algunos ejemplos de ejercicios de flexibilidad incluyen:
– Estiramiento de pantorrillas: Pararse frente a una pared y colocar los pies a la anchura de los hombros. Poner las manos en la pared al nivel de los hombros y doblar las rodillas mientras los talones se mantienen en el suelo. Mantener la posición durante 10 a 30 segundos.
– Estiramiento de cuádriceps: Pararse recto con los pies separados a la anchura de los hombros. Doblar una rodilla y agarrar el pie con la mano correspondiente. Tirar suavemente del pie hacia la parte posterior de la pierna con la espalda recta. Mantener la posición durante 10 a 30 segundos. Repetir con la otra pierna.
– Estiramiento de isquiotibiales: Pararse recto con los pies separados a la anchura de los hombros. Doblar las rodillas ligeramente y mantener la espalda recta. Inclínese hacia delante desde la cintura y agarre las piernas por encima de las rodillas. Mantenga la posición durante 10 a 30 segundos.
En la Residencia Balanci, contamos con un fisioterapeuta y una terapeuta ocupacional que ayudan a los residentes a realizar ejercicios específicos para mejorar su condición física.
Estos ejercicios se centran en fortalecer los músculos y mejorar la capacidad de mantener el equilibrio en situaciones cotidianas.
Creación de un entorno seguro en el hogar
Otro elemento que es a veces pasado por alto, es asegurarse de que el hogar de la persona mayor sea libre de riesgos que pueden causar caídas potenciales.
Por ejemplo, una de las medidas clave para garantizar la seguridad en el hogar es mantener una buena iluminación en todas las áreas, especialmente en pasillos, escaleras y baños. Algunos ejemplos que se puede realizar en la casa son:
1. Instalación de luces LED brillantes y de bajo consumo: Sustituir las bombillas convencionales por luces LED brillantes en pasillos, escaleras y baños para una iluminación más clara y eficiente.
2. Sensores de movimiento: Instalar sensores de movimiento que enciendan automáticamente las luces al detectar movimiento, especialmente en áreas de paso como pasillos y escaleras.
3. Luces nocturnas: Colocar luces nocturnas de baja intensidad en áreas como el dormitorio y el baño para facilitar la orientación durante la noche sin deslumbrar.
4. Lámparas adicionales:
Añadir lámparas de pie o de mesa en zonas de lectura o trabajo para evitar sombras y mejorar la visibilidad en áreas específicas.
5. Eliminación de obstáculos:
Mantener despejadas las áreas alrededor de las fuentes de luz para evitar tropiezos y asegurarse de que la iluminación sea efectiva en todo momento.
Uso de tecnologías y dispositivos de apoyo
Para prevenir las caídas, se puede adicionalmente aprovechar de las nuevas tecnologías y de los dispositivos de apoyo, que proporcionan una capa adicional de seguridad y asistencia.
Estos incluyen sillas salvaescaleras y dispositivos de alerta y monitoreo, que son herramientas fundamentales para proporcionar asistencia rápida en caso de emergencia. Algunos ejemplos pueden ser:
1. Dispositivos de alerta y monitoreo: Esos dispositivos de alerta y monitoreo, como pulseras o colgantes, permitan a la persona mayor pedir ayuda de inmediato en caso de una caída o emergencia.
2. Cámaras de seguridad: Instalar cámaras de seguridad en áreas clave de la casa, como pasillos y escaleras, puede ayudar a monitorear el movimiento y detectar posibles riesgos de caídas.
3. Barras de apoyo: Instalar barras de apoyo en pasillos, escaleras y baños para brindar soporte adicional y reducir el riesgo de caídas.
4. Asistentes de voz: Utilizar asistentes de voz, como Amazon Alexa o Google Home, para controlar dispositivos en el hogar, como luces y termostatos, sin tener que levantarse o moverse.
Conclusión
La prevención de caídas en personas mayores no solo es crucial para reducir la incidencia de accidentes, sino que también mejora notablemente la calidad de vida, permitiendo a los mayores vivir de forma más independiente y activa en su propia casa.
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